Herencia de Ganaderos

Siguiendo las bellas palabras del Buda Gautama, "Cuida el exterior tanto como el interior, porque todo es uno", y partiendo de la primitiva vivienda construida en 1760, realizamos la reforma intentando conservar la arquitectura sobria y sencilla original, dotándola a su vez de un ligero toque moderno. En todo el proceso tuvimos muy presente el respeto por el medio ambiente. Para ello utilizamos parte de los materiales de la casa original, como la piedra seca de los muros exteriores, y los nuevos los realizamos con un ancho de 80 cm, para que tuvieran una temperatura idónea durante todo el año. Continuando con las técnicas antiguas de construcción de la zona, seleccionamos y aplicamos maderas nobles como el pino y tejas dobles curvas en musgo verde para las cubiertas. Todos estos materiales nos garantizaron una incidencia mínima en la estética, así como para un futuro reciclado de los materiales, reduciendo al mínimo la incidencia sobre el medio ambiente.